Surf a cuatro patas

¿Por qué no en vez de darle un hueso a un perro lo subimos a una tabla de surf? En Imperial Beach, estado de California, se celebra desde hace ya diez años una multitudinaria y peculiar competicón de surf en la que las mascotas son los protagonistas.

Más de cincuenta perros participan y son juzgados por sus cualidades, el tiempo que aguantan y su confianza sobre la tabla como si fuesen surfistas profesionales. Desde kelpies australianos hasta pastores galeses pasando por chiguaguas y caniches, los surferos de cuatro patas surcan las olas encima de la tabla para volver a la orilla.

Los dueños de algunos concursantes caninos cuentan que llevan entrenándolos desde hace un tiempo en playas habilitadas para la presencia de los perros, y añaden que esta práctica del surf ayuda a afianzar la relación entre perros y humanos. El hecho de que conseguir que el perro sea capaz de meterse en el agua y flotar encima de la table, con el único apoyo de su dueño, hace que aumente la confianza entre ambos y las mascotas superen algunos de sus miedos.

Los perros compiten en Imperial Beach todos los años en diferentes categorías según su tamaño. Los más pequeños y de menos peso siempre participan en las primeras rondas, mientras que los más grandes y pesados surfean los últimos.

Además, la competición también parece una exhibición de modelos, muchos perros muestran trajes de baño, tablas y chalecos salvavidas de diferentes formas y colores.