El 'penekini', el bañador masculino que no deja marcas

Los diseñadores de moda de baño están en un momento complicado. Los modelitos para mojarse en el mar o tirarse a la piscina siempre son iguales y los tiempos, por el contrario, cambian. Después de que los bikinis femeninos sufrieran una considerable pérdida de tejido en beneficio del broceado corporal, ahora le llega el turno a los hombres.

En los últimos tiempos, ellos se han vuelto muy cuidadosos con su cuerpo. Tanto que ha surgido un nuevo tipo de hombre, el metrosexual: ese que usa cremas y cuida su cuerpo. A ellos tampoco les gustan las marcas del sol, para ellos es esta prenda revolucionaria de baño: el 'penekini'. Se trata de un bañador masculino que únicamente cubre el pene y los testículos del hombre gracias a un trozo de tela que se coloca rodeado a una pierna. Si el usuario ha descuidado su depilación, el bello púbico quedará al descubierto de un modo muy antiestético.

El diseñador colombiano Alfredo Barraza ha sido el artifice de semejante prenda. El objetivo que perseguía no era tanto el de no dejar marcas de sol, sino que quien lleve puesto el 'penekini' acapare todas las miradas de la playa. Sin lugar a dudas, este 'penekini' no es apto para tímidos, sólo los más osados y atrevidos serán capaces de llevarse uno a la playa.

Lo que más caracteriza al 'penekini' es su sencillez y su comodidad de llevar puesto. Su creador hizo este bañador con la intención de que quien lo lleve, pueda quitárselo en el momento de meterse al agua a nadar. El 'penekini' se puede colocar en la muñeca a modo de pulsera, por lo que el usuario que tenga uno presumirá de nadar libremente; después, volverá a cubrirse sus genitales al salir del agua.

El 'penekini' ya está revolucionando las playas brasileñas y de otros países latinoamericanos. Este verano, se espera que los españoles más atrevidos se pongan uno en nuestras playas. El 'penekini' no solo revoluciona por su diseño, también por su precio, lejos de ser caro, su valor ronda los cinco euros; además, los hay de diferentes colores y estampados. No hay excusas para que los más atrevidos tengan uno en su armario.