Borrar
Enólogos visitan la sala de crianza de la cooperativa Bodegas San Isidro (BSI), de la denominación Vinos de Jumilla. fran manzanera / AGM
Los vinos murcianos con denominación logran récords de ventas en el exterior

Los vinos murcianos con denominación logran récords de ventas en el exterior

Su avance coincide con un acelerado desplome de los tintos de mesa de la Región, que este año caen más de un 20%

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Domingo, 17 de junio 2018

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Tener un vino con distintivo de origen y darlo a conocer en certámenes internacionales acaba funcionando, aunque lleva tiempo. Después de dos décadas de promoción y mejora de calidad, los caldos certificados por los consejos reguladores de las denominaciones Jumilla, Yecla y Bullas están obteniendo ahora las mejores ventas al extranjero de su historia, sobre todo en Norteamérica. Los vinos de mesa, en cambio, no paran de desplomarse este año ante la caída de su demanda en África.

Las bodegas murcianas comercializaron 139.845 toneladas de vino en el mercado internacional durante el pasado ejercicio. Con tal volumen facturaron 178.574.580 euros, un 11,65% más que en 2016, según el Instituto de Comercio Exterior (Icex). Supone el doble que al inicio de la crisis (87.989.082 euros en 2007) y cinco veces más que en 2000.

El grueso de los resultados del año pasado correspondió a marcas con denominación de origen, que sumaron 88.729.300 euros (+9,9%). Jamás habían proporcionado tanto dinero. Les siguieron vermús, cavas, espumosos, dulces y sangrías, que también batieron su propio récord, con 55.092.410 euros (+20,3%). La otra cara de la moneda la presentan los vinos de mesa, que solo generaron 34.752.870 euros (+3,8%), la mitad que hace cinco años, cuando daban más liquidez que los caldos de calidad.

El primer trimestre de este año confirma la tendencia ascendente de las denominaciones murcianas, con 21.399.360 euros (+6,4%) y un acelerado desplome de los tintos de mesa, con solo 7.088.690 euros facturados (-20,6%). El resto de tipos de vino pierden impulso e inician la marcha atrás, con 9.539.670 euros (-15,8%).

Consumidores

¿Quiénes son fans de los vinos de origen Jumilla, Yecla y Bullas? Este año figuran, por este orden, estadounidenses, canadienses, suecos, suizos, alemanes, chinos, portugueses y daneses. Un bache lo representan los británicos, que han reducido sus pedidos de forma abrupta ante la incertidumbre del 'Brexit' (los tintos sudafricanos, australianos y chilenos juegan duro en ese mercado). Japoneses y mexicanos aún se hacen de rogar, pese a su enorme potencial de consumo y las campañas de promoción efectuadas. Los polacos están cada vez más interesados, pero los rusos son ya una causa perdida (lo suyo es el tetrabrick).

En cuando a los tintos de mesa, Francia y Portugal han tomado el relevo a Nigeria, Ghana, Burkina Faso, Costa de Marfil, Senegal y Guinea Ecuatorial, pero lejos de compensar las cuantiosas ventas que se realizaban a esos países africanos años atrás.

Por su parte, Estados Unidos y Reino Unido son los principales compradores de vermús, sangrías y espumosos elaborados en la Región.

Las denominaciones de origen tienen 68 bodegas inscritas: 48 en Jumilla (102.637 hectolitros elaborados en 2017), 11 en Bullas (17.623 hectolitros) y 9 en Yecla (82.791 hectolitros), que comercializan el 56,8% del vino de la Región. Para ellas trabajan un total de 1.356 viticultores. Murcia se sitúa este año como la séptima provincia en exportación de vinos de calidad, por detrás de La Rioja, Ciudad Real, Álava, Barcelona, Zaragoza y Valladolid.

Pero los caldos de Jumilla, Yecla y Bullas no son profetas en su propia tierra. Un estudio de AIS Group revela que el gasto anual en vino de los hogares murcianos es de solo 65,68 euros, cuando la media nacional es de 82,6 euros. Ocupan el sexto puesto por la cola (lo sorprendente es que también figuran en ella riojanos y castellanomanchegos). De ahí la proyección internacional de las bodegas de la Región.

Renovación y promoción

A primeros de los años noventa, el vino regional aún arrastraba los calificativos de 'peleón' y 'a granel'. Ahora se ha convertido en ariete de la 'marca Murcia'. La comercialización de caldos en el extranjero ya está obteniendo los frutos de veinte años de renovación tecnológica, introducción de nuevas variedades de uva como complemento de la monastrell (garnacha tintorera, cencibel, cabernet-sauvignon, merlot, syrah, macabeo, airén, malvasía, etcétera), inversiones en marketing, cultivos ecológicos, presencia en ferias internacionales y obtención de galardones.

Más del 80% del vino embotellado se vende al exterior, resalta el Instituto de Fomento (Info), un porcentaje que sube hasta el 92% en el caso de Yecla. Durante el pasado ejercicio supusieron 53.097 toneladas exportadas por parte de las tres denominaciones. Entre enero y marzo de este año expidieron 11.876 toneladas. Es un 1,4% más que en el mismo periodo de 2017, pero con mejores precios. En cambio, de vinos de mesa solo salieron 7.572 toneladas, un 37,3% menos. La calidad va ganando la partida.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios