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«Buscamos algo más que el fuego  de artificio de lo proyectado»

«Buscamos algo más que el fuego de artificio de lo proyectado»

La directora del Ibn Arabi Film Festival es una mujer entusiasta, que no se arredra ante los mil problemas (un euro vale ahora más que antes), pero sobretodo, es una mujer enamorada de un proyecto que pretende traer un cine diferente a Murcia. -¿Qué distingue el IBAFF de otros festivales de cine?

C. M.

Viernes, 17 de junio 2016, 07:45

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La directora del Ibn Arabi Film Festival es una mujer entusiasta, que no se arredra ante los mil problemas (un euro vale ahora más que antes), pero sobretodo, es una mujer enamorada de un proyecto que pretende traer un cine diferente a Murcia.

-¿Qué distingue el IBAFF de otros festivales de cine?

-Su elemento distintivo es que no solo exhibimos películas, también hablamos de ellas, de su significado. Se trata de dejar poso, no únicamente el fuego de artificio de lo proyectado.

-¿Por qué Ibn Arabi?

-Para reivindicar esa importantísima figura del pensamiento oriental, referente indiscutible de su cultura y religión. Un festival con esa figura tenía que tener por objetivo ir a lo profundo del pensamiento, no quedarse en lo superficial, hacer un viaje interior de las películas y sacarlas a la luz. A través de esas imágenes viajar a otros mundos que en palabras de Ibn Arabi son «mundos imaginarios», la esencia de las cosas.

-Con la que cae ¿cómo se consigue hacer el cuarto festival?

-Muy fácil, tenemos una persona que nos apoya y alienta, que es Kiarostami. El año pasado vino a recibir el Premio Honorifico, pero el objetivo que él tenía era impartir un taller, y se quedó tan encantado que quería volver, y eso nos impulsa a una nueva edición.

-¿Cómo se consigue que un realizador de primera fila como Abbas Kiarostami venga a Murcia?

-El año pasado fue a través de Mahmud Reza Sani, otro realizador iraní, que vino a Murcia y al saber que Ibn Arabi había nacido aquí estaba maravillado. El cine de Kiarostami comulga perfectamente con la filosofía intimista del Festival, y él se encuentra cómodo. Por eso repite.

-¿Cómo se realiza la selección de las películas?

-Se sabe que este festival proyecta películas con carácter de cine de autor, de cine casi artesanal. Buscamos películas que son recurrentes, aquellas que cuando terminas su visionado vuelven a decir mucho más que incluso cuando estabas viéndolas. No son de las que no significan nada a pesar del buen rato que te hacen pasar.

-De la sección oficial ¿qué película destacaría?

-Qué complicado me lo pones. Hay documentales largos extraordinarios, un corto documental maravilloso llamado 'Méditerranées'. Y unos cortos de ficción que han estado nominados a los Goya y han ganado, como 'Aquel no era yo'. Es complicado decir una.

-¿Qué es lo más significativo de las secciones informativas?

-Somos unos viciosos del cine y por eso tenemos tantas. Queremos ver a Buñuel en pantalla grande, y además del taller de Kiaorostami, queremos en la 'Selección IBAFF' ver su última película, y también 'Tabú'. Y como no sabemos parar, ponemos el documental sobre el premiado Carrière o volvemos a ver 'El sol del membrillo'. Y organizamos un encuentro de escuelas de cine, y una mesa de realizadores.

-Danos una razón para que la gente vaya al IBAFF.

-Es una oportunidad que no se pueden perder. Es algo extraordinario para la ciudad. Con estas películas es mucho lo que se recibe.

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